Desde el hi5 Estudiantes UAM nos llega la siguiente reflexión sobre la problemática general de la universidad pública que se puede ver en las siguientes direcciónes. Parte 1 y parte 2
La crisis social que, en el contexto mundial, se empieza a gestar es causa directa de las políticas neoliberales que buscan salida a través de las reformas sociales que se han implementado y que proponen instrumentar el desarrollo y completo establecimiento del sistema neoliberal o capitalismo salvaje. Estas reformas son dictadas desde las organizaciones económicas mundiales, tales como el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional; que llevan una relación de simbiosis con el Estado y los inversionistas privados, que buscan adherirse e implementar las políticas que beneficien a los intereses particulares de algunos cuantos oligarcas que participan en la vida económica de forma privada, es decir, los grandes monopolios que son auxiliados por los grupos de poder, denominado gobierno, como instrumento ejecutor de las reformas que pretenden estos fines.
Es a raíz de la instrumentación de estos lineamientos en México, que el descontento social se ha ido acrecentando hasta llegar a puntos álgidos expresados en movimientos como el del pueblo de Atenco, Oaxaca, los movimientos del sureste, por mencionar algunos. Actualmente la propuesta de reformas a la Ley del ISSTE, Ley Federal del Trabajo, Ley Televisa, La Reforma Energética, entre otras; han logrado que lo expresado no solo sea el descontento, sino que también, han despertado una actitud crítica hacia las políticas neoliberales misma que se expresa en la organización de movimientos que buscan la reivindicación y defensa de sus derechos no sólo constitucionales, también humanos ,que permitan reivindicar a las clases más desprotegidas: trabajadores, estudiantes, amas de casa… a aquellos a quienes sistemáticamente se les a negado la posibilidad de una vida digna y de calidad, que viven en una lógica de democracia partidista donde sus demandas reales son ignoradas por no beneficiar los intereses de quienes instrumentan las políticas del país.
En el marco nacional, la educación pública en México no ha sido exenta de estas reformas y se ha visto sometida a la embestida del proyecto neoliberal y privatizador.
Nos encontramos en una Universidad que paulatinamente pierde su carácter público y autónomo, en el que la precarización no se limita a los servicios sino que se inserta en la lógica de precarizar la capacidad crítica de quienes en ella se forman, se pretende homologar sus funciones con escuelas de nivel superior privadas cuya función se dirige a cubrir la demanda del mercado laboral al servicio de las grandes empresas transnacionales y privadas a las que se les ha dado entrada en suelo mexicano.
La problemática que la Universidad pública sufre no se mantiene desligada de la situación que la educación experimenta en sus niveles básicos, ya desde estos primeros momentos se crea la orientación para formar, tan solo, mano de obra calificada que valla en función de servir al capital privado.
El discurso del gobierno hace creer que a través de estas medidas, que benefician a los grandes monopolios y la inversión privada, se encontrara el camino viable para salir del subdesarrollo. Este mismo discurso es el que busca legitimar las reformas a la educación pública argumentando que la responsabilidad del Estado es proveer de educación, pero nunca se pone en claro que tipo de educación se proporciona y con que fines, manipulando conceptos como calidad y autonomía.
En nuestra “casa abierta al tiempo” la educación se ha insertado en estos lineamientos gracias a la participación de los funcionarios que coludidos con las mas altas esferas político-económicas del país y haciendo patente el servilismo que tienen hacia el gobierno, buscan las formas para darle cabida a esta privatización paulatina, a esta tecnificación, a esta precarización y desmantelamiento de la Universidad Autónoma Metropolitana.
Esto es visible claramente con los procesos de acreditación y readecuación de las carreras, ya que a partir de ellos es como se instrumenta la perdida de calidad y la tecnificación, por que como se ha visto, las acreditadotas hacen “sugerencias” que van en pro de la creación de un alumno con una mentalidad y un modelo educacional que sirva a la empresa privada, esto haciendo cambios tales como la perdida de materias criticas, el aumento de horas de idioma y computo que si bien son necesarias no se puede pensar que solo con ello el alumno acrecentara su capacidad de análisis o dialogo. Dándose aquí el cambio fundamental en esta perdida del sentido universitario, por que no olvidemos nuestra responsabilidad histórica como universitarios, que siempre ha sido aprender en pos de aplicar estos conocimientos para el desarrollo de la sociedad y el engrandecimiento de nuestro país, y no así el comprometernos con las empresas privadas teniendo un sentimiento de pertenencia y dependencia a ellas(sistema mcdonals), que es lo que se promueve con los cambios propuestos por las instancias correspondientes (ANUIES, etc).
Cave aclarar a lo que nos referimos por precarización y desmantelamiento de la universidad, esto es a partir de varias acciones conjuntas y sutiles con las que se busca llegar a la necesidad de privatizar, enmarcaremos grosso modo tres de ellas:
a) Las Cafeterías: aquí encontramos problemas como la progresiva reducción en las porciones de comida, el incremento de los costos.
b) Las Bibliotecas: la problemática primordial obviamente es el des abasto de libros.
c) Matricula: reducción constante y progresiva del numero de estudiantes que acepta la UAM.
El problema de la cafetería provoca que los compañeros tengan que comer fuera de la universidad o bien llegar muy temprano para alcanzar comida, en las bibliotecas sucede lo mismo al no tener lo indispensable, se provoca que el alumno tenga que salir a buscar los medios para satisfacer la necesidad de los textos, base para el desarrollo universitario, y la reducción de matricula aparte del ahorro por alumno que no logra ingresar, también busca el cierre de carreras de carácter critico, bajo el argumento de no tener aspirantes necesarios, esto nos muestra un claro panorama de la forma en que se deteriora nuestra alma matter, y no es otra cosa que el modelo implementado en la universidad con las decisiones y reformas de los funcionarios que buscan tener los pretextos, para argumentar la necesidad de privatizar en búsqueda de el alivio de estas problemáticas, cuando la respuesta a estas tal vez se encuentre en la mejor repartición del presupuesto, no gastándolo en fiestas lujosas o “juntas” donde los funcionarios no puedan salir por su propio pie, ni en domos y elevadores para las necesidades hedonistas de algunos, ni mejorando parte de las instalaciones con la pretensión de concesionarias.
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